Después de llevar a cabo su matrimonio civil el 19 de diciembre, Marité Matus y Camilo Huerta celebraron su unión con una fiesta el sábado por la tarde, a la que asistieron familiares y amigos cercanos
En contraste con la ostentosa ceremonia que la novia experimentó al casarse con su ex, Arturo Vidal, en esta ocasión, el evento tuvo un carácter más íntimo, con solo 170 invitados. Marité Matus tuvo la oportunidad de participar en todos los detalles de la fiesta.
“Quería todo súper sencillo, no tanta cosa. Poder disfrutar, que la gente disfrute y todo fluya. Sentarme, comer y compartir con los invitados”, comentó a LUN.
Entre los asistentes se encontraban figuras conocidas como Pamela Díaz, Mario Velasco, Pamela Leiva, Gissella Gallardo y Yito Vidal, primo de Arturo Vidal, entre otros, además de los hijos de la novia.
Fue precisamente uno de ellos, Alonso «Monito» Vidal, quien ingresó del brazo de su madre al centro de eventos ubicado en el sector de Chicureo.
Mientras sus hermanos menores arrojaban pétalos de flores a su paso, al llegar frente a Camilo Huerta, este último abrazó afectuosamente al adolescente de 14 años, con quien el preparador físico mantiene una sólida relación.
Este gesto, aunque emotivo, atrajo la atención debido a que no fue el padre de Matus quien la entregó en la ceremonia, y al parecer, no estuvo presente en la jornada.
Según informó el portal Infama, el progenitor tampoco asistió al matrimonio civil, prefiriendo «irse de vacaciones». La ausencia del padre en ambas ocasiones suscitó interrogantes sobre la situación, generando especulaciones sobre las razones detrás de su decisión de no participar en estos importantes eventos familiares.