Uno de los momentos más emocionantes en la misa de despedida de Héctor Noguera fue protagonizado por su hija menor, Emilia Noguera, quien sorprendió a los asistentes con una sentida intervención cargada de recuerdos, amor y arte.
La actriz de 42 años fue una de las últimas en tomar la palabra durante la ceremonia realizada en el Campus Oriente de la Universidad Católica, donde despidieron al reconocido actor chileno.
“Esta función sí que está llena. Estamos a tablero vuelto y eso lo haría muy feliz”, comenzó diciendo Emilia, emocionando al público con sus palabras. Recordó el profundo vínculo artístico y humano que la unía a su padre, destacando que fue él quien la guió en el camino de las artes escénicas desde muy joven.
“Él me enseñó a leer y escribir, pero no a los 6 años con un silabario, sino a los 18 con García Lorca. Me enseñó a hablar, pero no a los 2 años diciendo ‘papá’, sino a los 20, pidiéndome que apoyara bien en un monólogo de Shakespeare”, relató entre aplausos, destacando la forma tan única y artística con la que su padre la formó.
Emilia explicó que esas eran las herramientas de su padre, su manera de comunicarse y de transmitir emociones. Por eso, decidió rendirle homenaje leyendo un fragmento de Doña Rosita la soltera, texto que sabía era uno de los favoritos de Héctor Noguera, y que solía emocionarlo profundamente.
Sin embargo, la actriz tenía una última sorpresa preparada para cumplir uno de los deseos más íntimos del actor. Conmovida, contó que su padre le había pedido tiempo atrás que cantara una canción especial en su despedida, junto a su compañero Gonzalo Ramos.
Cumpliendo con ese pedido, Emilia interpretó Calma (Arrullo para mí mismo), de la banda chilena Bere, generando un momento de profunda emoción entre los presentes, quienes despidieron entre lágrimas y aplausos al querido “Tito” Noguera, uno de los grandes referentes del teatro y la televisión chilena.
