Este miércoles se conoció el veredicto en el caso de Jorge Escobar, tío abuelo de Tomás Bravo, quien estaba acusado de abandono con resultado de muerte del menor de tres años, encontrado sin vida en Caripilún en 2021.
El Tribunal Oral en lo Penal de Cañete resolvió absolver a Escobar, argumentando que no se logró acreditar el delito de abandono ni la existencia de dolo, es decir, no hubo intención de abandonar al niño en el lugar donde fue hallado su cuerpo.
Durante el juicio, se incorporó un video presentado por la defensa de Escobar, que generó dudas razonables sobre la posible intervención de un tercero. Según los abogados defensores, el registro mostraba a una persona ingresando al predio donde se encontraba Jorge con el niño.
El defensor regional, Osvaldo Pizarro, afirmó que el video indicaría que esta persona desconocida podría haber tenido relación con la desaparición de Tomás.
Sin embargo, Cristian Echayz, abogado del padre del menor, desestimó esa prueba, indicando que el registro correspondía a un horario distinto al de la desaparición.
Al término del juicio, Jorge Escobar tomó la palabra para declarar su inocencia. Aseguró que desde el inicio se le ha culpado injustamente por la muerte del menor, y que la acusación de abandono fue una forma de mantenerlo como imputado tras no poder probar un homicidio.
Escobar defendió su actuar, señalando que jamás dejó solo al niño intencionalmente. “Nunca lo he dejado solo para eso, porque es una tradición en el campo salir con los niños”, concluyó, visiblemente afectado.