Una amiga de infancia de la concejala desaparecida en Villa Alegre, María Ignacia González, entregó una estremecedora teoría sobre su desaparición, ocurrida la madrugada del domingo 15 de junio, tras visitar a un matrimonio amigo.
Desde entonces, no se sabe nada de ella, y las autoridades mantienen un amplio operativo de búsqueda en la zona.
La mujer, de 73 años, es militante de la Democracia Cristiana y muy querida en su comunidad. Su amiga la describió como una persona cercana al mundo rural y que conocía perfectamente el pueblo, por lo que descartó la posibilidad de que hubiera ido voluntariamente al río, zona donde se han enfocado parte de las labores de búsqueda.
«Creo que la ‘Nacha’ jamás habría ido al río», afirmó. «Ella conoce el pueblo de memoria, entonces cómo va a meterse al río. Esa teoría no me convence», agregó, visiblemente preocupada por el rumbo que ha tomado la investigación.
La amiga de la concejala sugirió que María Ignacia podría haber sido llevada contra su voluntad. «La llevaron obligada. No creo que esté el auto en el río. No sé qué andan haciendo buscándola ahí», expresó, señalando que ha tenido la intención de hacer pública su postura ante los medios.
En una declaración aún más impactante, reveló que la concejala estaba amenazada de muerte. “Ella estaba amenazada”, dijo, sugiriendo que esta podría ser una clave importante en el caso.
Según su testimonio, María Ignacia había dejado constancia de estas amenazas en Carabineros, y las autoridades conocerían la identidad de la persona que la acosaba. “Siempre la llamaban”, añadió, dando a entender que el hostigamiento era constante.
Estas nuevas declaraciones han añadido más tensión y urgencia al caso, que sigue sin resolverse, mientras la comunidad y la familia claman por respuestas y claridad sobre el paradero de la concejala.