Chris Aldridge, uno de los cuatro sobrevivientes, relató cómo enfrentó vientos de 100 km/h, hielo y nula visibilidad en el Paso John Garner, mientras cinco excursionistas fallecieron en medio de la tormenta.
Chris Aldridge, director británico de cine y televisión, describió los momentos de terror que vivió durante la tragedia en Torres del Paine, donde cinco excursionistas murieron tras quedar atrapados en una violenta tormenta de nieve. “La mayor parte del tiempo pensaba: ‘Aquí es donde morimos’”, relató al medio Daily Mail.
Aldridge formaba parte del grupo que caminaba junto a Victoria Bond, una de las víctimas fatales. Contó que la nieve azotaba su rostro y que el frío extremo comenzaba a entumecer manos y pies mientras intentaban descender por el Paso John Garner, en medio de condiciones climáticas que se deterioraban rápidamente.
El sobreviviente aseguró que, aunque tenía experiencia en caminatas complejas —incluido el Himalaya—, nunca había enfrentado un escenario tan peligroso. Dijo que la única razón por la que avanzó fue “la pura determinación de no morir”, mientras luchaban contra vientos que superaban los 100 km/h y una visibilidad casi nula.
El clima adverso se había mantenido varios días y, pese a las advertencias de viento fuerte, el grupo inició el Circuito O la madrugada del lunes 17 de noviembre. La subida inicial fue manejable, pero el descenso se volvió extremadamente peligroso debido al hielo, el viento y la imposibilidad de ver el camino. Varias personas se deslizaron sin control por la ladera.
Al regresar al campamento, Aldridge y otros excursionistas estaban al borde de la hipotermia y presentaban lesiones por congelación. Fue entonces cuando notaron que varias personas no habían logrado volver. Según su testimonio, los guardaparques no estaban presentes, ya que habían sido llamados a sus ciudades para votar, lo que retrasó las labores de rescate.
Los propios excursionistas y voluntarios organizaron una búsqueda improvisada para intentar localizar a los desaparecidos. Aldridge destacó la solidaridad del grupo pese a la crisis: “Todos se estaban ayudando. La gente daba lo que fuera necesario para salvar a otros”.
Esa noche, se confirmó que cinco personas habían fallecido: dos turistas mexicanos, dos alemanes y la británica Victoria Bond. Los otros cuatro, incluido Aldridge, fueron rescatados con vida. Conaf anunció que revisará los protocolos de seguridad tras la tragedia, mientras autoridades chilenas expresaron condolencias y agradecieron el trabajo de los equipos de rescate.
