Pamela Díaz abandonó el estudio de «Hay que decirlo» este miércoles, tras experimentar algunas molestias durante el programa.
La animadora reveló que desde su regreso de Perú sentía algo extraño en su rostro.
Durante la transmisión, Díaz comentó que cuando hablaba, su boca se movía hacia un lado, y al leer una mención publicitaria, notó que su lengua también se torcía. Preocupada, expresó que sentía como si hubiera recibido «un aire» o que estaba siendo neurótica.
El conductor Ignacio Gutiérrez le sugirió que visitara un médico, pues su problema en el rostro se hizo más evidente al intentar nuevamente leer la mención.
A pesar de la preocupación, el programa continuó en vivo presentando a los integrantes de «El Fenómeno», un nuevo espacio juvenil de Canal 13.
Tras una pausa comercial, Pamela no apareció nuevamente en pantalla. Su compañero, Nacho Gutiérrez, explicó que había sido llevada a un centro asistencial debido a la gravedad de su situación.
Gutiérrez confirmó que Díaz presentaba un problema visible en su rostro y que se dirigió a urgencias para recibir atención médica y determinar qué le estaba ocurriendo.
Pamela Díaz fue acompañada por su asistente, Gissella Gallardo, y el productor ejecutivo del programa hasta las puertas de Canal 13, para estar al tanto de su estado de salud.
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