Cata Pulido recordó en el programa «Podemos Hablar» los últimos momentos de vida de su hijo Sasha, quien falleció a los 28 años debido a una falla multisistémica.
La actriz explicó cómo los acontecimientos ocurrieron rápidamente y cómo tuvo que enfrentarse a la pérdida de su hijo en medio de una situación inesperada.
Antes de recibir la llamada que la llevó de vuelta a Chile, Pulido ya había notado algunos síntomas en Sasha que la preocuparon, aunque siempre mantuvo la esperanza de que su situación mejorara.
«Cuando hay una toxicidad alta en la sangre, porque tu hígado, tu páncreas y tus riñones no pueden depurar las toxinas, hay algo que se llama ‘encefalopatía’«, explicó.
Sin embargo, confesó que una intuición le hacía pensar que su hijo no viviría una vida larga.
Cuando el médico le informó que Sasha tenía pocas probabilidades de sobrevivir, Pulido tomó la difícil decisión de despedirse de él. Reflexionó sobre el egoísmo de los seres humanos al no querer sufrir y expresó que, aunque lo amaba profundamente, no quería que él viviera con las secuelas graves que habría tenido de sobrevivir.
Durante la entrevista, Pulido también mencionó el síntoma que la llevó a llevar a Sasha al médico: comenzó a hablar incoherencias.
«Cuando hay una toxicidad alta en la sangre, porque tu hígado, tu páncreas y tus riñones no pueden depurar las toxinas, hay algo que se llama ‘encefalopatía’«, explicó.
Este cambio en su comportamiento encendió las alarmas en su cabeza y decidió que su hijo debía recibir atención médica.
La actriz explicó que estos síntomas estaban relacionados con el daño hepático, lo que causó una condición llamada «encefalopatía», donde las toxinas no pueden ser eliminadas adecuadamente y comienzan a afectar el cerebro, provocando desvaríos.
Finalmente, Cata Pulido comentó cómo fue para ella aceptar que no había esperanza de recuperación para su hijo y prefirió dejarlo en paz, liberándolo del sufrimiento que habría enfrentado de haber sobrevivido.