La cantante nacional, María José Quintanilla, conversó con Martín Cárcamo en el programa De Tú a Tú, dónde repasó distintos momentos de su pasado y de su familia.
Para quiénes no saben, cuándo María José Quintanilla nació, su padre fue desahuciado por una poliartritis reumatoide, una enfermedad autoinmune dónde el organismo del paciente produce anticuerpos dirigidos contra los propios tejidos, lo que provoca una fuerte reacción inflamatoria, y que en la época de los 90 no tenía tratamiento.
Por esta misma razón, la joven vio a su padre solo acostado en una cama.
En medio de ese relato, la también presentadora de TV contó en el estelar De tú a tú que, sobre todo antes de que ella naciera, la vida de su familia no fue nada fácil, sobre todo en el ámbito económico.
Esto, porque por aquél entonces su familia vivía en un campamento. “Condiciones dolorosas, piso de tierra”, describió. “Un chupete que se perdía, claro, había ratones que se lo llevaban”.
“Doloroso”, comentó María José Quintanilla.
Por lo mismo, Quintanilla desde muy niña se sintió agradecida por tener un techo En Maipú. Ahí destacó el papel que jugo su mamá, porque “es súper buena para remar”, es decir, ante “cualquier cosa, ella va para adelante”.